La comida más importante del día. Crea el hábito.
Seguro has escuchado la frase "desayuno, la comida más importante del día". Es totalmente cierta, la mayoría de las personas lo tienen claro, lamentablemente parece ser la comida que más se descuida o se salta más a menudo.
Seguro has escuchado la frase "desayuno, la comida más importante del día". Es totalmente cierta, la mayoría de las personas lo tienen claro, lamentablemente parece ser la comida que más se descuida o se salta más a menudo.
Los expertos en nutrición afirman que el desayuno le aporta al organismo una cuarta parte de las calorías que necesitas al día. Disfrutar de un desayuno nutritivo y sabroso puede llevarte sólo entre 15 y 30 minutos cada mañana.
¿Cuál es el mejor desayuno?
En estricto rigor, un buen desayuno debe incluir: leche o yogurt, para el aporte de calcio y proteínas; pan o cereales, para la contribución de carbohidratos y fierro, y fruta o jugos de fruta, para satisfacer las necesidades de líquido y vitaminas. También se pueden elegir otros alimentos como: huevos, quesillo, queso o palta.
Beneficios del desayuno:
- Mejora tu rendimiento intelectual. El desayuno favorece capacidades como: la memoria, la concentración y la creatividad.
- Proporciona mayor rendimiento físico. Los aportes de nutrientes y energía están directamente relacionados con una buena respuesta física y con la productividad.
- El secreto de la alegría. Tomar un buen desayuno eleva los niveles de glucosa en la sangre, que si son estables tienen efectos sobre los mensajes positivos que llegan al cerebro. El buen humor y la risa son la respuesta externa de esos mensajes.
- Mejora tu nutrición. El desayuno cubre tus necesidades de nutrientes. Si éste es completo, te aporta hidratos de carbono, vitaminas, minerales y fibras.
- Ayuda a controlar tu peso. Una correcta alimentación desde la primera comida de la mañana evitará que piques entre horas, lo que influye en tu peso. Las investigaciones han asociado el desayuno a un menor porcentaje de grasa corporal y un menor IMC.
- Reparto equilibrado de calorías. Un buen desayuno marca la pauta de las 4 o 5 comidas diarias, entre las que se distribuyen las calorías equilibradamente si se respetan cantidades y variedad de alimentos.
- Previene alteraciones en el organismo tales como hipoglucemias e hipotensión.
¿Aún no te convences? Crea el hábito!